sábado, 3 de abril de 2010

¿Qué es Temer a Dios?

Temer a Dios viene de saber quien es Él y quienes somos nosotros. Cual es mi posición y cual es la de Él. Es vernos a nosotros mismos frente a un Dios que todo lo puede. Es considerar que nosotros somos polvo y él es nuestro Hacedor. Que no nos hicimos nosotros a nosotros mismos. a

Básicamente, temer a Dios es Obedecer a Él. Atender su voz y hacer lo que Él desea que hagamosc cuando nos habla. Valorar eso dentro de nosotros y ponerlo en práctica. El Salmo 147:11 nos dice que Jehová (que significa El Autoexistente, Dios) se complace en los que le temen, en los que confían en su gran amor.

Entonces, ¿por qué temer a Dios? Por Su amor; eso es lo que debe motivarnos. Pero no podemos temerle íntegramente por nuestra propia cuenta, no esta en nuestra naturaleza. Si bien es cierto que nuestra conciencia nos dice lo que es bueno y lo que es malo, lo que sabemos que debemos hacer, no siempre lo hacemos. Pues pensamos que si hay un Dios, éste debe estar lejos, en sus asuntos o que simplemente no le importamos. Y como no lo vemos, es como si no exitiera para nosotros. Pero cuando consideramos su Palabra escrita, la Biblia, vemos que todo cambia. Nos percatamos que Él dice que esta atento a todos nuestros caminos b , que él conoce nuestro corazón c , incluyendo lo que estamos pensado ahorita mismo. Al descubrir esta verdad, vemos que nada se le escapa, que no podemos burlar su mirada pues todo lo sabe y nadie tiene que explicarle algo de alguien.d Entonces, si no podemos escaparnos, lo único que nos queda es rendirnos completamente. Rendir nuestra voluntad, nuestros sentimientos, emociones y nuestro intelecto. En otras palabras, rendirle nuestro ego, nuestro orgullo, nuestro yo. Que es lo que más valoramos. De otra forma, llegaríamos a un callejón sin salida más temprano que tarde o frustrarnos y amargarnos, porque sabríamos que no estamos haciendo lo correcto, lo bueno. Y siendo honestos, creo que lo más inteligente que podemos hacer es humillarnos. Saber que Él es el Superior. Y ahora me surge una pregunta ¿Por qué el ser humano es tan orgulloso? No viviremos para siempre, vamos a morir sin planearlo, y, ¿qué será de nosotros?

Sin embargo, también podríamos tratar de esforzarnos en temer a Dios con nuestros propios recursos, por nuestros meritos, pero la verdad es que no la vamos armar. Nos convertiríamos en personas religiosas (como millones lo hay en el mundo) al intentar hacerlo y nos cansaríamos, porque no estaríamos nunca satisfechos. Eso es Religión. Religión es hacer lo que pensamos que es correcto agradándonos a nosotros sin llegar a agradar nunca a Dios ¿Y sí llegaramos a mirarnos y ver que nada de lo que hagamos puede satisfacer la Justicia de Dios? Obviamente nada que hagamos podría, pues estamos haciendo lo que creemos que es mejor sin tomar en cuenta a Dios.

Pero déjenme decir, que hay quien ya pudo satisfacer o cumplir plenamente lo que Dios pide y exige que hagamos, por quien es Él: Jesucristo. La carta a los Colosenses capítulo 1 versos 21 al 23 narra por boca de Pablo el apostol:

"Antes, ustedes estaban lejos de Dios y eran sus enemigos, pues pensaban y hacían lo malo. Sin embargo, ahora Dios los ha hecho sus amigos por medio de la muerte de su Hijo, quien se hizo hombre. Dios lo hizo así para que ustedes pudieran presentarse ante él sin pecado y libres de culpa. Pero esto será así, sólo si mantienen su confianza en Cristo y siguen creyendo en lo que nos promete el mensaje de la buena noticia. Este mensaje ha sido anunciado por todo el Imperio romano, y yo colaboro anunciándolo."

Sólo podemos vivir teniendo fe (confianza) en esta obra redentora de Jesús. Si confiamos en que sí le rendimos nuestra vida y lo invitamos a morar a nuestra vida, en nuestro corazón; se cumplirá su Temor en nosotros. Y al ser cada día llenos de Su Espíritu, manifestaremos Su amor en nosotros que nos permitirá temerle, gracias a lo que el Hijo de Dios hizo.

Así pues, El Temor de Dios o a Dios, te acerca a Él. Pues cuando temes a Dios, ya no vives en pecado. Y eso te da la seguridad de que Dios no te rechazará en Su presencia (cuando te acercas a él y le hablas). Entras con corazón sincero, en completa fe, sin una conciencia que te acuse y lavado por Su sangre y la Palabra de Dios e. No tienes de que avergonzarte f. Te sientes libre, descansado y si has pecado (aunque no se debe vivir en pecado) tienes a un defensor: a Jesucristo, que es llamado el Justo g.

Ahora, no es lo mismo miedo que temor en este caso. El miedo te aleja de Dios. Y viene por no conocerle o por haber pecado y no quieres acercarte a Él porque piensas que Él no te ama, pero sí, Él realmente te ama. Jesús mismo dijo: Todos los que el Padre me da vendrán a mí; y al que a mí viene, no lo rechazo h. Y para eso esta disponible la Sangre de Jesús. Isaías 1:18 nos dice:

»Vengan, pongamos las cosas en claro
—dice el Señor—.
¿Son sus pecados como escarlata?
¡Quedarán blancos como la nieve!
¿Son rojos como la púrpura?
¡Quedarán como la lana!

Pero, ¿para qué temer a Dios?

Hay muchas razones que explican el temor de Dios y muchas buenas razones para temerle, en la Biblia se describen infinidad. Algunas de estas explican:

Salmo 111:10

El principio de la sabiduría es el temor del Señor;
buen juicio demuestran quienes cumplen sus preceptos.
¡Su alabanza permanece para siempre!


Proverbios 8:13-14

13 Quien teme al Señor aborrece lo malo;
yo aborrezco el orgullo y la arrogancia,
la mala conducta y el lenguaje perverso.
14 Míos son el consejo y el buen juicio;
míos son el entendimiento y el poder.


Proverbios 16:6

Con amor y verdad se perdona el pecado,
y con temor del Señor se evita el mal.


Proverbios 19:23

El temor del Señor conduce a la vida;
da un sueño tranquilo y evita los problemas.


Ya lo hemos visto. Temer a Dios trae muchas recompensas. Pero deseo que enfoques tu mirada en Él y de esta manera, temer a Dios por quien es Él. Ya que tarde o temprano nos vamos a topar cara a cara con Él. Así que, ¿por qué no empezar a relacionarnos en amistad con Él desde ahora? Él es el Autoexistente, el que tiene vida en sí mismo y quien no necesita de nada ni de nadie. Pero nosotros sí. Colosenses 1:16 nos muestra que TODO fue creado por medio de Él y para Él. Eso es razón suficiente para temer a Dios, pienso yo. Pero no todos lo desean, yo te invito a que seas de los que quieran estar cerca de Su creador. Piensa en Dios, piensa en ti. Reflexiona en la eternidad. Si miraras por un instante que hay vida más allá, te darías cuenta que temer a Dios es lo máximo. Que estudiar la Biblia, Su palabra, es lo que nos da Aliento para seguir viviendo. Que creer y permitir a Jesucristo ser nuestro Salvador y Rey es permanecer cerca de Dios para siempre.

a Salmo 100:3
b Proverbios 5:21
c Jeremías 17:9-10
d Juan 2:25
e Hebreos 10:22
f 2 Timoteo 2:15
g 1 Juan 2:1-3
h Juan 6:37

La Nación de Israel

Desde el pasado, hemos aprendido mucho de los israelíes. Al leer la Biblia -la Palabra escrita de Dios- vemos por su ejemplo, tanto que lo que se debe hacer como lo que no hay que hacer a. Dios escogió esta raza o pueblo por una visión que no alcanzamos a comprender. Dios amó ésta y todas las familias de la tierra, pero eligió manifestarse y revelarse a ellos primero, con un propósito: Que de su descendencia naciera Jesús, su Hijo amado. Y así fue.

Así que, si vemos todo desde una perespectiva divina, la cual es perfecta, es un panorama desacertado, considerar a los judíos-isrelíes+ crucificadores de Jesucristo, como culpandolos de su muerte. Si leemos con claridad las Sagradas Escrituras, Dios mismo nos enseña que Él quiso enviar a Su Hijo Jesús a morir por nosotros, y Jesús, en obediencia al Padre puso, entregó su vida inmerecidamente por todos nosotros, para que todo aquél que cree a Su nombre y pone su confianza en Su obra redentiva no este apartado de Él, sino cerca de Él mismo. Por eso hoy invito a que Amemos Al Pueblo Judío y no seamos instigadores para odiarlos, pues ellos no siguen siendo culpables, pues Jesús también murió en su lugar. Fue por medio de ellos que vino y nació el Salvador de nuestra humanidad, y fueron ellos quienes nos dieron la Biblia -el primer libro empastado- la cual hoy podemos tener en nuestras manos y disfrutar su mensaje en lo más profundo de nuestro ser. La gloria sea para Dios.

Por otro lado, séa como séa, tenga los resultados que tenga, también fueron judíos los implicados en financiar en buena parte, la expedición que llevaría a Cristóbal Colón a descubrir América. Y eso no es un ejemplo menor, ya que me muestra que muchos de ellos son personas destacables, son gente que le gusta invertir en el progreso, aunque para dejar su marca en la historia, pero y creo que han tenido grandes ideas que han aportado buenas cosas, y eso es muy bueno. Pues antes de la Edad Media, mientras los del Islam tenían prohibido por sus leyes no dedicarse a actividades financieras y los Cristianos consideraban el lucro como actividad impía, los judíos de la península ibérica absorbían por completo las profesiones de tesoreros, recolectores de impuestos, cambistas y prestamistas. Así que pienso que varios de ellos interpretaban bien la Ley de Dios, sabios e inteligentes, que aprovechaban cada buena oportunidad que se les presentaba y que pienso podían lograr mucho, sin amar el dinero y abusar del prójimo, sí a Dios se lo permitían.

Lo que no esta nada bien, es rechazar a su propio Mesías: Jesucristo. Muchos creen a los Principios de las Leyes de Dios y por eso el Señor los sigue bendiciendo pero Si entendieran el Plan de Salvación de Adonai, Yahaweh para Jesús, sabiendo que Él es Dios, tendrían el Espíritu de la promesa, por el cual le llamarían Papá a Dios. Y sus vidas serían totalmente otras. Sabrían que Él los amó hasta la muerte.

Sí, es cierto, también hay judíos o israelíes que son ateos o agnosticos como cualquier otro en el mundo. Otros por así decirlo, son rebeldes intelectuales o filósofos. Pero, hay otro grupo de israelíes, que son de otra índole: Los que creen en un Mesías, los que creen al Nombre de Jesús. Me gustaría conocer a un par de ellos, de veras fieles. Ellos pienso deben sentirse privilegiados por el hecho que de ellos nació la semilla de Dios. Y tal vez, doblemente agradecidos con Dios por conocerle de esa manera y doblemente responsables por el mensaje tan tajante que tienen que dar, pero a la vez descansando en la Gracia de Dios. No lo sé. Sin embargo pienso que es una bendición igual a la mía, de que Cristo murió por ellos, por nosotros, por todos. Y al recibir a Jesús como su Salvador y Señor, eso nos convierte a cada etnia en una sola familia, la Familia de Dios.

a 1 Corintios 10:11; Romanos 15:4

+ Judío = De la religión del Judaísmo que proviene de cualquier raza o etnia. Ó, que proviene estrictamente de la Tribu de Juda, una de las 12 Tribus de Israel, pero que no vive la religión Judaica.

Israelí = De la etnia o raza de Israel, no necesariamente judío.